Autor: Alessio Puleo
Editorial: Del Nuevo Extremo
N° de Páginas: 319 Páginas
Puntuación: ♥ ♥ ♥ ♥ ♥ ♥
Una historia de amor de enorme valentía.
Ella,
hermosa y divertida, está descubriendo todo sobre la vida. Él, un príncipe
diferente, desenfadado y generoso, es capaz de amar como nadie lo ha hecho
jamás y luchar por ese amor contra lo imposible.
La
salud de Ylenia es frágil. Tiene 18 años y padece una grave enfermedad del
corazón. Su familia decide trasladarse a Italia, para que tenga más
posibilidades de hallar un donante.
La
vida de Ale, un chico italiano de la misma edad que Ylenia, está marcada por
las peleas con su padre, las malas notas en el colegio y las salidas con los
amigos.
Se
conocen, se enamoran y sus vidas cambian para siempre: Ylenia descubre las
ganas de vivir, Ale un motivo para hacerlo.
Opinión personal
Hace muchos años que
escucho sobre esta novela y era uno de los libros que más ansiaba por leer
desde que se anunció su publicación en Argentina (de la mano de la editorial
Del Nuevo Extremo). Me había llamado mucho la atención que era una historia de
amor con una protagonista que sufría una enfermedad del corazón y pensé que
sería la clase de novela que me enamoraría y se convertiría en una de mis
lecturas favoritas del año. Y no fue tan así que digamos…
La pluma del autor me
recordó un poco a la de Federico Moccia (que por cierto es el que presenta la
novela con su “prologo”) y tiene una forma simple de narrar que uno termina transportándote
en esa historia de amor que uno no sabe cómo termina (o intuye o tiene una
mínima idea de cómo acaba; lo cual a mí me pasó más lo primero que lo segundo);
por lo que ha sido una lectura muy llevadera como rápida (con sus contratiempos
incluidos). Hay que reconocer que ha tenido una idea muy maravillosa pero lamentablemente
no lo aprovechó del todo y quedó así como quedo. Hubo diálogos que me dieron la
impresión de que eran forzados o rebuscados y escenas que me parecían tan
predecibles que no me hicieron emocionar tanto. Aunque dije que fue una lectura
rápida, me costó mucho engancharme a la novela y conectarme con los personajes
hasta que empecé a leer la segunda mitad del libro (o casi en los últimos
capítulos). De ahí en más, no paré de leer hasta al final.
- ¿Sabes?, el mundo se ilumina
cuando sonríes.
Si hablamos de los
personajes, bueno, no hay mucho que decir. Ylenia y Ale (especialmente este
último) son los que llevan el peso de la novela.
Con Ylenia tuve un enorme problema y es que no
he logrado conectarme con ella. La tome como una chica muy caprichosa y ni
siquiera tiene un mínimo cambio en cuanto ella descubre la verdad sobre su
salud y pasa a ser un personaje muy egoísta que no tomaba en cuenta los sentimientos
de los demás. Y ni hablar en como reaccionaba o se comportaba o interactuaba con
Ale. Por más que recordaba que ella estaba enferma y que no quedaba mucho
tiempo de vida, simplemente NO. No me parecía nada justificable. Lo irónico de
esto es que al final de todo sentí lastima por ella hasta que empecé a leer los
últimos nueve capítulos de la novela. Pero bueno, no hay ningún personaje
perfecto y no todos pueden ser calcos iguales de otros que conocemos y tenemos
mejor estima. Por lo que Ylenia no es perfecta, no ha sido la mejor
protagonista que he conocido en mucho tiempo, pero es así como es.
Con Ale me pasó todo
lo contrario con ella: me ha encantado muchísimo incluso con las burradas que
comete y las aventuras absurdas y bizarras que termina involucrado por Claudio.
Me ha hecho reír mucho con sus ocurrencias, sus meteduras de pata y su manera
de solucionar sus problemas. Sentí mucha pena por él a causa del trato que
recibía de Ylenia. En serio, por más tonto que fuese y los errores que
cometiera, no merecía esa clase de trato. Aun así, no me olvido de la enorme
burrada que hizo Ale para olvidarse de Ylenia y que no me causo la menor
gracia. Aunque en su defensa, él no sabía nada de la salud de Ylenia y ni la
involucrada en cuestión sabía nada de Ale (lo que me lleva a decir que esto
terminó formándose un extraño triángulo amoroso). Los errores se cometen y ese
era la clase de error que se hubiera evitado si Ylenia les hubiera contado a
ambos lo que querían saber. Igualmente, a pesar de ello, el chico termino por
romperme el corazón.
El resto de los
personajes quedan un poco opacados por los protagonistas. Algunos no quedan al
olvido como los padres de Ylenia o de Virginia o Claudio y llegan aportar un poco
la historia (la buena ventaja de que la novela esté narrada en tercera persona);
pero algunos Iván, Silvia, Pietro o la familia de Ale podrían haber hablado más
de sí y no haber terminado como un florero o un personaje al uso en un momento
exacto.
Me hubiera gustado
ver como profundizaba esa historia de amor que, desgraciadamente, no me
convenció mucho (especialmente porque al final lo sentí muy instalove) y también que hubiera dado
más juego con los otros personajes. A pesar de ello y todo lo demás, tiene un
hermoso y breve desenlace que, debo admitirlo, me hizo llorar.
Mi
corazón te pertenece. ¡Para siempre!
Escucharás mi corazón tenía una historia que prometía y que al final se
quedó a medias. Pese a sus desajustes, ha sido un libro que me entretuvo, me
hizo reír por uno de sus protagonistas y que culmina con un final que te puede
tocar el corazón.
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